2006-JUNIO:Transpirenaica; Etapas 13 a 14

ETAPA 13 ORBAIZETA-ELIZONDO
Por roncar más que los demás hemos desterrado a Pablo y ha dormido comodamente sólo en una habitación, con cama grande y a sus anchas..¡ya quisieran muchos un castigo así!; hoy además le toca seguir descansando, porque somos Juanma y yo los que pedaleamos. Para mi será la última etapa de la travesía.

Visitamos la fábrica de armas de Orbaizeta, de finales del XVIII, que está en estado ruinoso; cruzamos los edificios que todavía están en uso junto a la fábrica, entre ellos la iglesia, cuyas funciones a hora son de almacén o carniceria: el matarife está en la puerta descuartizando unos corderos que chorrean sangre a borbotes...¡impactante!

A medida que nos acercamos a Roncesvalles va refrescando. Allí nos encontramos con peregrinos que inician el camino de Santigo, también con Pablo y re-desayunamos los tres juntos antes de encarar las rampas del Puerto de Ibañeta. Nos adentramos en la niebla, la temperatura sigue bajando, creo que llegamos a los 13º (nada mal para un 29 de junio). Por unas fuertes rampas de cemento entramos en Francia sin nada que nos lo indique, sólo algún que otro cartél nos hace saber donde estamos. Descendemos cerca de 16 km por una carretera estrecha, recientemente asfaltada y con gravilla que discurre por un valle verde y frondoso. Llegamos a BANCA (Francia) y comenzamos a subir fuertes repechos. La cantidad de cruces y las indicaciones poco claras de la guía nos llevan a confusión. El hambre se acentúa. Preguntamos a un joven paisano de la zona cómo llegar al Collado Elorrieta: sólo habla francés y euskera...finalmente su interés por comunicarse nos sirve de gran ayuda, ya que sus indicaciones a base de signos y gestos nos ponen en la buena dirección.
Alcanzamos la muga 102... ¿Sabéis que es una muga? y descendemos por un camino asequible hacia Erratzu, que también está en fiestas. Tomamos la carretera y llegamos a Elizondo, donde nos espera Pablo en una estupenda casa rural.
Desmontamos mi bici, ha cumplido con nota su misión, y eso que es de Decathlon. Lo único que ha perdido en el camino ha sido el timbre...y porque se lo quise quitar para gusto y satisfacción de mis compañeros de viaje.
Salimos a cenar a un buen restaurante del pueblo.

ETAPA 14 ELIZONDO -FUENTERRABIA
Como me toca descansar y ya que no puedo hacer la etapa yo, cedo mi rueda trasera a Juanma, porque su llanta se rompió hace jornadas (seguramente en alguna bajada) lo que le provocaba un bloqueo repentino de la rueda cada vez que frenaba y le hacía derrapar. Se ha llevado más de un susto.
No hay notas de Pablo, pero creo recordar que se encontraron con mucho barro y, aunque los collados no son muy altos: 700-800m, si que debes superar un gran desnivel en poca distancia, lo que termian por machacarte y el último día ya no está uno para derroches de fuerza. Además, como el día anterior hay numerosos cruces y caminos y no es facil orientarse.
Comemos con buena relación calidad-precio en Echalar. Juanma vuelve a pinchar...otra vez... diremos que, como ha sido el que más km ha hecho, es lógico que haya sido el que más pinchara...

En Irún hacen coincidir sus fiestas patronales de San Marcial con nuestro final de etapa, para recibir con jubilo y algarabía a los dos ciclistas...¡que honores! ¡ qué lío con el alarde mixto!.
Poco después de las 20.00 entran triunfalmente en las playas de Fuenterrabía y procedemos al baño para festejar el final de la proeza...¡prueba superada!
Salados, cansados pero satisfechos por lo realizado dejamos el Cantábrico con dirección a Madrid, hay morriña y ganas de domir en nuestra cama habitual. Llegamos a las cuatro de la mañana.

Con la euforia del fin de etapa pronosticamos que la próxima gran ruta sería el año que viene por Irlanda...